
Chicha de Jora

Hacia el 300 a.C. ya se tomaban bebidas fermentadas a base de maíz. Entonces esta bebida diferenciaba los estratos sociales dando linaje y prestigio a quienes la consumían. Se reservaba para la clase alta. Su producción y consumo contribuyó a la mejora del maíz, a la potabilización del agua, a tecnología para fermentar y a las vasijas que la contenían.
Míralo en 3D
Ceremonia del Sacrificio Mochica
En la naturaleza, la muerte es necesaria para dar paso a la vida. Es probable que el sacrificio humano representado en esta botella esté asociado al equinoccio primaveral, el paso del invierno a la primavera. Este es un momento importante en el calendario agrícola, al ser el anuncio de la época de lluvias.
En esta botella de cerámica se representan ritos propiciatorios: sacrificio de guerreros cautivos y presentación de la copa a los dioses. Una serpiente de dos cabezas parece sostener en sus manos el corazón de los sacrificados. Su cuerpo divide la botella en dos hemisferios: uno superior y otro inferior.
Alto: 287 mm / Largo: 154 mm / Ancho: 154 mm / Peso: 754 g
Colección Museo Larco
En esta botella de cerámica se representan ritos propiciatorios: sacrificio de guerreros cautivos y presentación de la copa a los dioses. Una serpiente de dos cabezas parece sostener en sus manos el corazón de los sacrificados. Su cuerpo divide la botella en dos hemisferios: uno superior y otro inferior.
Alto: 287 mm / Largo: 154 mm / Ancho: 154 mm / Peso: 754 g
Colección Museo Larco
Datos interesantes sobre la Chicha de Jora
El maíz fermentado
La denominación “chicha de jora” es referida a una bebida fermentada o cerveza, preparada a base de maíz germinado, agua, enriquecida, de acuerdo a los distintos tipos de preparación con diversas frutas y en algunos elementos de origen animal. En quechua se denomina ahjé o aqha. Es un fermento en base a granos de maíz, primero germinados y luego fermentados con bacterias y levaduras.
Preparando la jora
De acuerdo a datos etnográficos y etnohistóricos, el proceso de elaboración comienza por la selección del maíz, este debe tener granos altamente amiláceos y en lo posible de conformación y tamaño parejo, se denomina en quechua “sara aque”. Luego se procede a germinar el grano mediante el uso de pozos forrados con material vegetal, remojados y tapados para simular las condiciones de temperatura, luz y humedad del suelo. Este proceso dura de tres a cinco días. Una vez germinado, se denomina “jora” o “wiñapo aque”. Se extrae de los pozos, cuidando que no le de la luz directa y se enjuaga o remoja con agua fría para detener el proceso de germinación, que a su vez elevó la temperatura del grano.
El proceso hasta la fermentación
Los granos se secan al aire libre sin contacto directo con el piso, se extienden “alfombras” vegetales o esteras de juncos o totoras al sol. Una vez secos se muelen, en morteros o batanes generalmente de piedra o madera. Una vez molida la jora es mezclada con agua y hervida. Este proceso denominado decocción. El líquido es revuelto con cucharas de madera para evitar que se sedimente. Luego se deja descansar el preparado, comenzando el fermentado. Allí se agregan los aditivos como frutas para aumentar la fermentación. Se cuela el líquido mediante paños o coladores. El último paso es la fermentación mayor, donde se obtiene la graduación alcohólica final, al dejarse reposar durante algunos días el brebaje, generalmente en cántaros gruesos, de bocas anchas, enclavados en el piso.
Consumo de chicha de jora y su uso actual
El consumo preshipanico podía ser de tipo doméstico, cotidiano, asociado a festividades, rituales, pactos entre distintos grupos de elite, trabajos comunitarios, dentro de sistemas de redistribución.
Actualmente se realizan estudios orientados a reconocer propiedades alimenticias e inmunológicas de la chicha de jora de acuerdo al contenido microbacteriano, asociando las proporciones de su consumo a mejoras en salubridad; con contenidos proporcionan beneficios nutricionales.